Si quieres comenzar a consumir otras harinas y mejorar tu alimentación pero no sabes cómo, te invito a que veas esta receta de crackers o galletas de harina de arvejas con semillas. Están buenísimas, bien crocantes y son fáciles de preparar. Además, se hacen en minutos y no tienen gluten. Por lo que no tienes excusas para no probarlas. Normalmente terminamos comprando nuestras galletas en el supermercado, pero la mayoría de las que venden suelen estar hechas con harinas refinadas, aceite de girasol o de palma, grasas saturadas y otros ingredientes poco saludables. Así que, qué mejor que cocinarlas en casa, con mejores ingredientes para cuidarnos un poco más.
Los que sigan el blog desde hace tiempo sabrán que siempre incentivamos el consumo de harinas con un mayor aporte nutricional en nuestras recetas como la de garbanzos con los crepes de harina de garbanzos o el pan integral, también la de avena con las tortitas de avena y plátano.
En esta ocasión te presentaré dos opciones para la receta. Una será con harina de arvejas y harina de avena en partes iguales y en la otra reemplazaremos la harina de avena por la de arroz. La de arvejas ya la vimos por primera vez hace un tiempo con el pan con harina de arvejas y fue un gran éxito. Si aún no lo probaste, te recomiendo visites la publicación, verás que está muy rico.
Es muy interesante incluir estas harinas en nuestra dieta pues brindan un gran aporte en fibra y en proteínas lo que las hacen más saciantes que la harina de trigo tradicional. Recuerda que en el caso de que no consiguieras harina de avena, siempre puedes comprar avena laminada o instantánea y triturarla con una procesadora o un mixer hasta obtener una textura similar a la de la harina. Para las semillas vamos a utilizar semillas de chía, lino, sésamo y girasol, pero puedes reemplazarlas por otras que te gusten como las de calabaza o amapola.
Estas galletas de harina de arvejas son ideales para el desayuno o para acompañar el mate. También para picadas saladas, con queso crema casero, con paté de morrón, con un poco de guacamole, con la mayonesa casera y un poco de queso y aceitunas o unas tiras de morrón en conserva y unos pickles. En fin, como verás son muy versátiles y hay opciones para todos los gustos.
Con las cantidades que te presento en la receta rinden aproximadamente unas cien galletitas de cada sabor de unos cuatro centímetros de diámetro que puedes guardar en un tupper bien cerrado o un bollón de vidrio para consumir cuando gustes. Luego, puedes personalizarlas a tu gusto haciéndolas más grandes o más finitas si así lo deseas. Así que sin más que agregar, vamos a ver la receta paso a paso. Espero que las disfrutes.
Si te gustó y te resultó útil esta receta de galletas de harina de arvejas con semillas, te agradecería si pudieras compartir el enlace con tus amigos y seguidores en las redes sociales. De esta forma, me ayudarías muchísimo.
Ingredientes para las galletas
Opción 1: Galletas de Harina de Arvejas y Harina de Avena
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Ingredientes
200g de harina de arvejas
200g de harina de avena
2 cdas. de cebolla en escamas
3 cdas. de semillas de chía
3 cdas. de semillas de lino
3 cdas. de semillas de sésamo
3 cdas. de semillas de girasol
½ taza de aceite de oliva
1 taza de agua
1 cdta. de sal
Opción 2: Galletas de Harina de Arvejas y Harina de Arroz
Ingredientes
200g de harina de arvejas
200g de harina de arroz
2 cdas. de pimentón ahumado
3 cdas. de semillas de chía
3 cdas. de semillas de lino
3 cdas. de semillas de sésamo
3 cdas. de semillas de girasol
½ taza de aceite de oliva
1 taza de agua
1 cdta. de sal
Preparación de las galletas de harina de arvejas y harina de avena
Instrucciones
- Colocar en un bol la harina de arvejas y la harina de avena.
- Agregar y mezclar la sal, la cebolla en escamas y 3 cucharadas soperas de cada una de estas semillas: chía, sésamo, lino y girasol.
- Hacer un hueco en el centro agregar la media taza de aceite de oliva extra virgen y una taza de agua.
- Comenzar a amasar hasta formar una masa homogénea, si nos quedara muy húmeda o seca agregar alguna de las harinas utilizadas o un poquito de agua extra según fuera el caso.
- Dejar reposar la masa de 30 a 40 minutos.
- Precalentar el horno a unos 180 °C
- Hacer un bollo con la masa, espolvorear la mesada con maicena y estirarla del grosor deseado, en éste caso lo hicimos de unos 3 a 4 milímetros. Con los restos de la masa los unimos y seguimos armando galletas hasta terminar.
- Utilizar un cortante circular o un vasito de unos 4 centímetros de diámetro, colocarlas en una placa que se pueda llevar al horno.
- Llevar a horno durante 10-12 minutos aproximadamente, puede variar de acuerdo al grosor de las galletas y a cada horno. Debemos estar atentos para que no se quemen.
- Retirar del horno y colocar en una fuente para que se enfríen.
- Luego podemos guardarlas en un tupper o frasco de vidrio tapado para consumir cuando queramos.
Preparación de las galletas de harina de arvejas y harina de arroz
Instrucciones
- Colocar en un bol la harina de arvejas y la harina de arroz.
- Agregar y mezclar la cucharadita de sal, el pimentón ahumado y 3 cucharadas soperas de cada una de estas semillas: chía, sésamo, lino y girasol.
- Hacer un hueco en el centro agregar la media taza de aceite de oliva extra virgen y una taza de agua.
- Comenzar a amasar hasta formar una masa homogénea, si nos quedara muy húmeda o seca agregar alguna de las harinas utilizadas o un poquito de agua extra según fuera el caso.
- Dejar reposar la masa de 30 a 40 minutos.
- Precalentar el horno a unos 180 °C
- Hacer un bollo con la masa, espolvorear la mesada con maicena y estirarla del grosor deseado, en éste caso lo hicimos de unos 3 a 4 milímetros. Con los restos de la masa los unimos y seguimos armando galletas hasta terminar.
- Utilizar un cortante circular o un vasito de unos 4 centímetros de diámetro, colocarlas en placa.
- Llevar a horno durante 10-12 minutos aproximadamente, puede variar de acuerdo al grosor de las galletas y a cada horno. Debemos estar atentos para que no se quemen.
- Retirar del horno y colocar en una fuente para que se enfríen.
- Luego podemos guardar en un tupper o frasco de vidrio tapado para consumir cuando queramos.
