Desayunar de manera saludable y rica no es tan difícil como parece. Ni tampoco tiene porque ser aburrido. Si hace poco veíamos cómo hacer tortitas de avena y plátano, hoy te traigo unas gachas de avena que no solo se hacen rapidísimo sino que pueden llegar a ser una comida sumamente completa y nutritiva.
Se trata de un desayuno que no es nuevo. De hecho es muy popular en países como Inglaterra, Escocia y Estados Unidos desde hace décadas. En inglés se lo conoce como “porridge”. Sin embargo, en los últimos años se ha vuelto tendencia en todo el mundo. Esto fue gracias a una mayor difusión de las propiedades de la avena y los beneficios de incluirlos en una alimentación saludable. Algunos de los cuales mencioné brevemente en la publicación de la pizza de avena sin harina.
Comer estas gachas de avena es una de las mejores maneras de comenzar la mañana. Pues te dejará saciado y te aportará la energía necesaria para afrontar un largo día. Si bien se suele asociar al desayuno, lo cierto es que puedes consumirlo en un brunch, en una merienda o en cualquier momento del día en el que necesites comer algo rápido y saludable.
Si lo vas a consumir en la mañana temprano antes de ir a trabajar o a estudiar y tienes mucha prisa lo recomendable, para ahorrar tiempo, sería dejar la avena en remojo toda la noche en leche o agua. Luego, solo tienes que recalentarlo por la mañana. En general prefiero hacer el porridge con leche ya que queda más sabroso y cremoso, al punto que me recuerda un poco al arroz con leche. Aunque en agua con un poco de sal, como se hace la receta original, quedará un postre más ligero.
Quizás lo mejor de esta comida sea su versatilidad. Pues se adapta perfectamente a los ingredientes que dispongas. Y es que existen infinitas posibilidades y combinaciones. En este caso voy a utilizar bananas y peras como frutas, pero perfectamente podrían ser frutillas o arándanos. Eso dependerá de las frutas disponibles según la estación del año. Las bananas son muy recomendables porque aportarán dulzor al plato, ya que no le vamos a agregar azúcar moreno como se suele hacer en la receta original. Otras opciones pueden ser pasas de uva, dátiles, ciruelas pasas o higos deshidratados.
Además, cualquier combinación de frutos secos le aportará un toque crujiente y grasas saludables. Aquí voy a utilizar almendras picadas. Pero si quieres más ideas pueden ser nueces pecán, pipas de calabaza, semillas de girasol o pistachos. Podrías incluso aprovechar para utilizar la granola casera que tengo publicada en el blog. El toque final se lo puedes dar con unas semillas de chía o de amapola. Saber que contamos con todas estas posibilidades es importante porque nos permiten ir variando el desayuno cada día de forma que nunca nos aburramos ni nos resulte algo monótono.
Así que ahora ya sabes que es posible comer rico, saludable y en poco tiempo, dale una oportunidad a este porridge de avena e inclúyelo en tus desayunos o cuando más te apetezca. También mencionar que si por algún motivo no puedes consumir la avena, hay otras posibilidades. Esta receta se puede hacer perfectamente con quinoa. Si no sabes cómo preparar la quinoa, te dejo el enlace a una publicación muy interesante en donde te explico los pasos a seguir.
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Detalles de la Receta
2 porciones
5 minutos
5 minutos
Muy fácil
Ingredientes
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Ingredientes
8 cdas. de avena laminada (instantánea)
½ litro de leche descremada (2 vasos)
ralladura de cáscara de 1 naranja (opcional)
2 ramitas de canela (opcional)
TOpPings de las gachas de avena
1 banana
1 pera
canela en polvo al gusto
almendras picadas al gusto
ciruelas pasas
Preparación de las gachas de avena o el porridge
Instrucciones
- En una olla calentar a fuego medio la leche y agregar la ralladura de cáscara de naranja y las ramitas de canela.
- Cuando rompa el hervor, bajar el fuego, agregar la avena y cocinar por 2 o 3 minutos. Remover continuamente y dejar hasta que notemos una textura grumosa.
- Retirar del fuego y dejar la olla tapada por 2 minutos más.
- Servir en dos tazones y por arriba colocar la canela en polvo, la fruta cortada, los frutos secos picados y las ciruelas pasas. Esto es según el gusto del comensal.
