Hoy te traigo una receta muy sencilla pero no por eso menos sabrosa. Este revuelto de verduras con huevo es un platillo muy saludable y nutritivo que nos puede sacar de un apuro en esos días en los que llegamos tarde, cansados, con hambre y no nos da el tiempo de cocinar algo demasiado elaborado. Porque seamos sinceros, nadie se va a poner a preparar una merluza con salsa de coco o una bondiola con papas al horno con tan poco tiempo disponible ¿No es así? Generalmente lo que hacemos es terminar llamando por teléfono o mediante alguna aplicación para pedir la comida. La cual suele ser muy poco saludable. Aquí es donde entra esta receta, que es muy rápida de hacer, requiere de pocos ingredientes y te ayudará a mantener la línea.
Los revueltos de verduras son un platillo muy versátil y de aprovechamiento. Pues nos permiten elaborar algo sano con las verduras que tengamos en la heladera. En este caso usé zanahorias y una cebolla, pero también se podría agregar morrón, berenjenas o zapallitos.
Puedes consumirlo solo como una cena ligera antes de acostarte o para colocarlo por sobre unas tostadas de pan integral de harina de garbanzos, que queda buenísimo. Asimismo, podría ser una guarnición de unas supremas de pollo a la plancha, algún bife de pescado o unas milanesas de berenjena. De esa forma, obtendremos una comida super completa nutricionalmente, saludable y rápida. Pero por sobre todas las cosas muy rica. Espero que prueben este revuelto de verduras con huevo y que me comenten si les gustaría que publique más recetas sencillas como esta.
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Ingredientes para el revuelto
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Ingredientes
2 zanahorias
1 cebolla
4 huevos
½ taza de queso rallado (Dambo o Mozarella)
Aceite de oliva o vegetal neutro (cantidad necesaria)
Sal al gusto
Pimienta al gusto
Cómo preparar revuelto de verduras
Instrucciones
- Pelar y cortar la cebolla en cubitos chiquitos y saltearla en una sartén antiadherente con un fondo de aceite de oliva. Lavar bien las zanahorias y rallarlas.
- Cuando la cebolla esté transparente, agregar las zanahorias ralladas y continuar cocinando hasta tiernizar. Si fuera necesario, agregar un poco de agua, aproximadamente ¼ taza, para que no se pegue al fondo de la sartén.
- Agregar sal y pimienta al gusto.
- En un bol, batir los huevos y agregarle el queso rallado. Colocar una pizca de pimienta y mezclar bien.
- Incorporarlos al salteado y mezclar de a poco hasta que se cocinen. El punto justo va a ser al gusto de cada comensal, al igual que cuando hacemos unos huevos revueltos.
- Retirar de la hornalla y servir.
